Enfermedad de Parkinson
¿Qué es la enfermedad de Parkinson?
La enfermedad de Parkinson es la segunda enfermedad neurodegenerativa más frecuente después de la de Alzheimer. Se caracteriza por la pérdida progresiva de neuronas dopaminérgicas de la sustancia negra mesencefálica. Esto provoca una disfunción progresiva de determinados circuitos cerebrales implicados en el control motor.
Su etiología es aún desconocida, aunque actualmente existe un amplio consenso sobre la implicación de factores genéticos y ambientales.
Síntomas.
Generalmente se distinguen cuatro síntomas principales que afectan a la motricidad. El temblor es el síntoma más conocido, aunque no siempre está presente. Afecta principalmente a las extremidades y se suele reducir al realizar movimientos voluntarios. El síntoma más característico es la bradicinesia o lentitud en la realización de movimientos. Es necesario que este síntoma esté presente para el diagnóstico de la enfermedad.
Otros síntomas motores son la rigidez o el aumento del tono muscular, la inestabilidad postural y la dificultad en la marcha, lo que puede dar lugar a caídas. La persona con Parkinson suele inclinar la cabeza y el cuerpo hacia delante o hacia un lado.
Los síntomas no motores suelen aparecer en los estadios más avanzados de la enfermedad e influyen en la calidad de vida de las personas afectadas. Entre estos síntomas se encuentran dolores musculares inespecíficos, dificultades de micción o estreñimiento, aumento de la sudoración, trastornos del sueño, trastornos sexuales, disfunción olfatoria y trastornos cognitivos.
¿Cómo se detecta?
El diagnóstico se realiza a través de la anamnesis y la exploración neurológica. Es necesario realizar un diagnóstico diferencial con otras enfermedades neurodegenerativas. Los criterios clínicos que más se utilizan para diagnosticar la enfermedad, son los del Banco de Cerebros de la Sociedad de la Enfermedad de Parkinson del Reino Unido (UK PDSBB).
Los criterios clínicos especifican que los pacientes con enfermedad de Parkinson deben presentar, como mínimo, dos de los cuatro síntomas motores expuestos anteriormente, teniendo que ser uno de ellos la bradicinesia.
¿En qué consiste el tratamiento?
Tratamiento farmacológico.
La levodopa es el tratamiento farmacológico más utilizado, ya que mejora los síntomas motores en la mayoría de los pacientes. Sin embargo, disminuye su eficacia a largo plazo (6-7 años de tratamiento).
El tratamiento farmacológico con levodopa aumenta la incidencia de aspectos adversos. Pueden aumentar las discinesias y las fluctuaciones motoras. Los pacientes pueden experimentar varios momentos de deterioro al día, en los que aparece el bloqueo motor cuando disminuye el efecto del fármaco. Estos momentos de deterioro se alternan con mejores momentos a nivel motor.
Tratamiento quirúrgico.
Cuando el tratamiento farmacológico no consigue controlar las complicaciones de la enfermedad, se plantea un tratamiento alternativo de tipo quirúrgico. Actualmente, el más utilizado es la estimulación cerebral profunda. La estimulación eléctrica mejora la función motora, lo que permite reducir la dosis de medicación.
El tratamiento quirúrgico no es un tratamiento curativo, sino paliativo, por lo que no va a modificar el curso de la enfermedad. El éxito de este tratamiento depende del paciente, de la correcta colocación del electrodo y de la adecuada programación del sistema de estimulación.
Para poder llevar a cabo el tratamiento quirúrgico, el paciente debe ser menor de 70 años, con un diagnóstico de la enfermedad de al menos 5 años de evolución y que responda de forma positiva a la levodopa. Además, deben descartarse otras enfermedades que impidan la cirugía.
Tratamiento rehabilitador.
Tanto el tratamiento farmacológico como el quirúrgico deben ir acompañados de una intervención multidisciplinar. Fisioterapia, logopedia, neuropsicología, psicología clínica y terapia ocupacional son los servicios necesarios para desarrollar un programa de intervención con el objetivo de mantener o mejorar las capacidades afectadas y el estado funcional de las personas con Parkinson.
Sobre la autora:
Asunción Navajas Santos.
Logopeda. Col/29-1282
Máster ABA. Análisis aplicado de la conducta en autismo y otros trastornos del desarrollo.
Técnico educación infantil.
Actualmente cursando el Máster de Neuropsicología