DESARROLLO DEL HABLA EN LOS PRIMEROS AÑOS
El camino que recorre cada niño/a hasta llegar a hablar como un adulto es diferente. Pueden avanzar muy rápido y conseguir que entendamos todo lo que dicen a los 3 años. En otros casos el desarrollo puede ser más lento y alcanzan el mismo nivel 2 o 3 años más tarde. Por otro lado, hay niños/as que siguen otro camino diferente, deteniéndose en mitad de este camino y necesitando más tiempo y ayuda para acabar su recorrido.
El desarrollo del habla comienza con el balbuceo. El niño/a empieza a explorar los sonidos que es capaz de emitir, imita los sonidos que escucha y los va uniendo para formar sílabas. Durante los 3 primeros meses de vida, el bebé va a emitir sonidos que se localizan en la parte velar o uvular, es decir, con los fonemas /g/ o /j/. Es muy común incitar a los niños/as a decir la palabra /ajo/, cuando notamos que empiezan vocalizar. Entre los 6 y 8 meses aparece el balbuceo canónico, es decir, la emisión de sílabas formadas por una consonante y una vocal, normalmente. Si el balbuceo no aparece, puede indicar que existe algún problema en el desarrollo del lenguaje. A los 10 meses el balbuceo se vuelve más complejo. Los niños/as comienzan a encadenar sílabas y les dan entonación, dando lugar a las primeras palabras al final del primer año.
Entre los 12 y los 18 meses van apareciendo las primeras palabras. La aparición de estas primeras palabras va a ser diferente en cada niño/a, dependiendo del repertorio de fonemas usado en el balbuceo. A los 20 meses se produce la explosión léxica, es decir, el niño/a comienza a adquirir vocabulario muy rápido hasta los 4 o 5 años. Esta nueva adquisición de vocabulario va a permitir usar sílabas cada vez más complejas, usar más sonidos consonánticos y vocálicos, así como usarlos de forma generalizada en las palabras. Estas palabras van a ser bisílabas y trisílabas.
Por otra parte, los fonemas se van adquiriendo gradualmente, con periodos en los que a veces es pronunciado correctamente y a veces no. Las edades de adquisición de los fonemas son aproximativas. Cuando decimos que a los 3 años deberían tener adquirido el fonema /k/, queremos decir que más del 90% de los niños/as a esa edad son capaces de pronunciarlo. Normalmente, los niños/as usan producciones similares a las del adulto. Al principio las simplifican en su habla, sustituyendo los sonidos más difíciles, y poco a poco van alcanzando la forma adulta, completando su repertorio de fonemas y usándolos de forma correcta.
Sobre la autora:
Asunción Navajas Santos.
Logopeda. Col/29-1282
Máster ABA. Análisis aplicado de la conducta en autismo y otros trastornos del desarrollo.
Técnico educación infantil.
Actualmente cursando el Máster de Neuropsicología